Delante de ésta imagen convendrán conmigo que si el Club Atlético Osasuna, el Granada Club de Fútbol, el Real Valladolid o el Real Club Deportivo Mallorca SAD ganasen la Liga Santander, sería un auténtico milagro. He escogido estos cuatro equipos porque su presupuesto no llega a los 40 millones de euros. En el mundo profesional del fútbol, el presupuesto lo es todo, o casi todo. (Aunque incluso a veces se produzcan milagros y gane algún equipo con menos presupuesto, eso solo pasa en contadas ocasiones. Y la verdad sea dicha que produce cierta satisfacción que equipos con escaso presupuesto se lleven por delante equipos con muchísimo más presupuesto). En el mundo de la empresa privada no es tan evidente, y se puede observar recurrentemente cómo los peces más pequeños se acaban comiendo a los más grandes.
(Éste es el despacho de Jeffrey Preston Jorgensen, más conocido como Jeff Bezos, en el principio de una compañía llamada AMAZON).
En el mundo de las empresas privadas, a diferencia del mundo de las empresas públicas, de lo que se trata, ése es su gran secreto, es invertir la mínima cantidad y mirar, eso sí, de optimizar los mínimos recursos para llegar a alcanzar grandes metas. Y así ha sido desde el principio de los tiempos. Si ustedes se molestan en estudiar la Historia de las grandes empresas que en el mundo ha habido, la inmensa mayoría empezaron de ésta manera. En todos los negocios, sin excepción, el gran secreto es comprar barato y vender un poco más caro. Y esto es válido para todos, incluso para La Bolsa. Mucha neófitos se rompen la cabeza de cómo invertir en Bolsa, y es tan simple como esto. Y sí, para que todos ustedes lo sepan, en Bolsa SÍ se puede ganar siempre.
Y la otra gran diferencia que hay entre la empresa privada y la empresa pública, es que en la empresa privada se ficha talento y en la empresa pública, por lo visto, solo sirve para colocar amigotes. Y así van todas ellas. Normalmente ponen delante a gente que no sabe ni dónde tiente la mano derecha y el desastre no tarda en llamar a su puerta. Gente con un "ego" desmesurado, directamente proporcional a su falta total de talento, que en el mundo de la empresa privada no servirían ni para abrir las puertas. (Más de uno se haría daño, o lastimaría a alguien). Y, de repente, todos estos tipos se encuentran con unos sueldos estrafalarios que no habrían soñado cobrar en su miserable vida, y además se suelen venir p'arriba.
¿Cuánta gente "colocada a dedo", y que no sirven para nada, conocen ustedes? Servidor conoce unos cuantos...
Y el pueblo soberano, pese a saberlo, sigue votándoles una y otra vez. Como si no tuvieran bastante con lo que les han fastidiado la vida hasta el presente. (Al final acabas pensando que la culpa no es toda de los políticos. Los bobos que los ponen en sus cargos son en realidad los verdaderos culpables).
El presupuesto de Ràdio i Televisió d'ANDORRA, SA (RTVA), la que en teoría es de todos, aunque la triste realidad es que es de unos pocos, es de 3.897.680€. Y si las cifras publicadas hoy son correctas, dan verdadera pena. Y dan verdadera pena en primer lugar porque no se entiende que si sus visitas son tantas como hoy se ha afirmado, es más que raro que se publiquen en otro medio. ¿Para qué vas a publicar cifras en otro medio si el tuyo es tan y tan magnífico?. Lamentable.
Y dan verdadera pena en segundo lugar porque en Andorra hay un medio digital que en primer lugar quisieron ignorar, del que más tarde pretendieron reírse y que a continuación atacaron, que dichas cifras no le llegan ni a la suela de los zapatos. Y ése medio digital no es otro que l'Altaveu.
E intentan, y no solo RTVA sino todos los demás, copiarte una y otra vez. Pero por mucho que lo intenten, no se acercan ni por equivocación. Ni por prescripción médica. Y como están faltos de talento siempre lo quieren resolver con más inversión sin ton ni son, porque los resultados van a ser cada vez más nefastos, Y si no, al tiempo.
Prestarse a hacer el ridículo, por un plato de lentejas, es lo que tiene. Aceptar cargos para los que no se tiene ninguna capacitación, es demencial. Que el pueblo soberano siga una y otra vez consintiendo todo esto, no tiene nombre.
En la empresa privada, nadie hubiera fichado un director con ése perfil. Y en el hipotético caso que alguna lo hubiera hecho, no hubiera durado ni dos telediarios. En la empresa privada no se consiente tirar el dinero sin ton si son. En la empresa pública, por lo visto, alguno hasta se permite el lujo de sacar pecho con ésas más que penosas cifras. Esperpéntico y kafkiano.
Intenten ser felices.
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