El pueblo griego no ha sucumbido al miedo. By Mario Conde.

Seamos claros: desde la UE se hizo absolutamente todo lo posible —e imagino que algo imposible también— para conseguir que Tsripas retirara el Referéndum —Alemania “no negociaremos con el referéndum convocado”— y para conseguir, si permanecía vivo, un rotundo SI. Los anuncios del fin del mundo para Grecia si ese era el resultado son un hecho incontestable. En España, como era de esperar, el País lidera el movimiento de ese tipo. UN editorial analizaba el mismo día del referéndum el no con estas palabras: “Y desde ahí no es descartable cualquier secuencia de desastres: suspensión de pagos o default, creación de otra moneda mala, salida del euro, ruinas familiares y austeridad endurecida. Para Grecia; pero en su grado máximo socavarían a toda la eurozona, a la moneda única (ya no irreversible) y a la credibilidad de la Unión (por no resolver un asunto que equivale al 2% de su PIB). El no es enormemente peor que el sí.” Bueno pues ha salido No. Y de manera rotunda. Incontestable. El pueblo griego no ha tenido miedo a los anuncios catastrofistas, quizás porque la situación social griega es de catástrofe. Otra cosa es quiénes han sido los responsables. Desde luego TSripas no, porque no ha gobernado en los años en los que se produjo el destrozo y despilfarro. Otra cosa es que sus propuestas y soluciones sean tales o empeoren, si cabe, la situación. Son asuntos que cada uno tiene su propia dinámica y problemática. Bien, y ¿ahora qué? Pues si hacemos caso a los términos tajantes de Alemania resultará que Grecia va a ser expulsada del euro. Yo, sin embargo, no lo veo fácil. Por cierto no creo que fuera una tragedia para los griegos. Dentro y fuera del euro le quedan años muy duros. Si pudiera contar con un mínimo garantizado de financiación internacional — Rusia, China— quizás fuera mucho mejor para Grecia tener su propia moneda y recuperar soberanía monetaria y mas adelante ya veríamos si se adhería al euro o seguía como Inglaterra, Suecia y Dinamarca, por ejemplo. En todo caso es, visto desde donde se quiera, un triunfo político para TSripas. Otra cosa es que ese triunfo político sea administrado bien y conduzca al éxito a Grecia o la suma en un caos sin precedentes. Pero el pueblo griego no ha tenido miedo y ha evidenciado que se pueden resistir las presiones amenazantes de Alemania y la UE. Y eso va a traer consecuencias políticas. En España pocos dejarán de reconocer que esto pende afectar favorablemente a las expectativas electorales de Podemos. Y si el acuerdo final existe y es muy favorable para Grecia, el papel del PP y del PSOE quedarán tocados. Y ya veremos si Ciudadanos por derivada. En todo caso vamos a ver qué pasa.